El amor: la magia intrínseca del ser
Vandana Shiva
Es una de las pensadoras más dinámicas y provocadoras del mundo. Una
de las ecologistas, feministas y filósofas de la ciencia más
prestigiosas a escala internacional que luchan activamente contra el
modelo neoliberal de globalización y a favor de los derechos de los
pueblos.
Vandana Shiva nació en Dehradun, India, una ciudad antigua enclavada
a los pies del Himalaya. Hija de un padre conservacionista y una madre
dedicada a la agricultura, Shiva pronto desenvolvió un profundo respeto
por la naturaleza. Estudió en Dehradun con la aspiración de dedicarse a
la ciencia y se graduó en física para después hacer un Master en
filosofía de la ciencia en la universidad de Guelph (Ontario, Canada).
En 1979, terminó su doctorado en Física Cuántica en la Universidad de
Western Ontario.
Debido
a su formación en física y su amor por la naturaleza, Shiva comenzó a
cuestionar el impacto de la tecnología científica sobre el medio
ambiente, y abordó la investigación interdisciplinaria de la ciencia, la
tecnología y la política ambiental en el Indian Institute of Science y
el Indian Institute of Management en Bangalore. En 1982, Shiva fundó el
Research Fondation of Science, Technology and Ecology (RFSTE), una
institución que se dedica a la conservación de la biodiversidad.
Nueve
años más tarde, fundó Navdanya, que significa literalmente “nueve
semillas” para proteger la diversidad de las semillas de su tierra
natal. El RFSTE y Navdanya alientan a los agricultores a rechazar las
presiones políticas y económicas que pueden poner en peligro la
biodiversidad de la India.
Shiva participó en el movimiento pacífico Chipko de los años 70. Este movimiento, encabezado principalmente por mujeres, adoptaba la táctica de abrazar a los árboles para evitar que los talaran. Es una de las líderes del movimiento contra la globalización. Defiende la sabiduría de las prácticas tradicionales, como queda en evidencia en su libro Ecología Védica.
Autora
de 13 libros y más de 300 ensayos publicados, Shiva ha combatido
públicamente la “revolución verde” de los años 70, con la que se
pretendía aliviar el hambre mejorando los cultivos con el uso de
irrigación, fertilizantes, pesticidas y mecanización. Ella afirma que
“la revolución verde” pretendía usar la tecnología Occidental para
asistir a los agricultores del Tercer Mundo. Pero en vez de riqueza, la
nuevas semillas de alto rendimiento trajeron la pobreza y la destrucción
ambiental”. Además
de la crítica a la “revolución verde”, Shiva continúa con la campaña
internacional contra los alimentos genéticamente modificados. Argumenta
que los organismos genéticamente modificados (OGMs), como los cultivos
con tolerancia a herbicidas y Bt, aumentan la necesidad de
usar químicos para combatir las resultantes súper malezas y súper
plagas, y reducen la biodiversidad con la contaminación genética, y
anulan la libertad de los agricultores con monopolios de patentes y
dependencia de semillas estériles. Ha
colaborado con varias organizaciones en África, Asia, América Latina,
Irlanda, Suiza y Austria en sus campañas contra la ingeniería genética.
Shiva
ha sido asesora de varias organizaciones gubernamentales en la India y
otros países. Ha recibido más de 15 premios nacionales e internacionales
por su contribución a la conciencia ecológica y la preservación
ambiental, entre ellos en 1993 el Right Livelihood Award (también conocido como el Premio Nobel alternativo) “…por colocar a la mujer y la ecología como eje para el análisis del desarrollo moderno.” Se
la considera “ecofeminista” por también tener una gran influencia en
temas de género. Ha publicado varios libros y artículos con el fin de
cambiar la percepción de la mujer en el Tercer Mundo a través del
reconocimiento de sus logros.
Entre sus libros destacan Abrazar la vida: mujer, ecología y desarrollo Biopiratería: el saqueo de la naturaleza y del conocimiento.
“Cuando
Cristóbal Colón partió para el “nuevo mundo” lo hizo con unas “cartas
patentes” que daban el poder a quien las tuviera a tomar posesión de
cualquier tierra que encontraran en el mundo que no estuviera gobernada
por príncipes blancos cristianos”. V.SH.
“Las
patentes son una vuelta a la colonización de hace 500 años. Los pueblos
de Tercer Mundo han sobrevivido a pesar de haber sido despojados de sus
riquezas, por tener biodiversidad. Sus últimos recursos son las
semillas, las plantas medicinales, los forrajes, que satisfacen sus
necesidades de salud y nutrición. Ahora también se quiere despojar a los
pobres, que ya fueron despojados por la colonización, de este último
recurso vital a través del uso de patentes”. V.SH.
FUENTE: http://mujeresparapensar.wordpress.com